Hace días que he estado tratando de escribir algo me viene rondando en mi mente. He estado leyendo varios articulos acerca del miedo y el papel de los publicistas y el comercio. Hay cosas muy interesantes en todo lo que es la publicidad subliminal y los efectos en el consumo de ciertos productos. La mayoría parte de la premisa básica de asociar un estímulo positivo al consumo de productos que tienen una carga negativa o perniciosa para la salud (el cigarrillo por ejemplo), llevando al consumidor a obviar lo malo por sobre el placer de degustarlo, vestirlo o simplemente tenerlo.Pero qué hay de otro tipo de publicidad, o miedos que se han internalizado en la sociedad.Yo he estado tratando de entender el tema y hasta el momento, no he encontrado ninguna razón natural, consistente, para explicar temores que son parte de la idiosincracia social que no tengan su origen en un provecho económico. La sociedad está condicionada a elementos publicitarios ya sea para fortalecer su necesidad de gozo , y si eso no funciona, potenciar y desarrollar sus temores. Y es muy interesante darse cuenta de ello. Entre algunos que he visto, aquí, a la vuelta de la esquina:
.- Temor a la delincuencia (bueno, con justa razón). Lo que ha potenciado el crecimiento explosivo de servicios de seguridad y todo tipo de asociados. O uds. realmente creen que la explotación de la desapareción de la niñita Madeleine McCann no ha repercutido en millones y millones de dólares para muchos?...si incluso en Chile tenemos nuestros profitadores televisivos que burdamente desarrollan un argumento de telenovela con "Dónde está Elisa?", haciendo creer a cientos de personas que "todo el mundo vé la telenovela", cuando es clara la concertación publicitaria de medios de prensa escrito y televisivos para generar un fenómeno donde simplemente NO lo hay. No les quepa duda que la siguiente etapa es empezar a explotar con bombos y platillos todo caso policial similar, o meridianamente familia, entrevistas, foros, consultas a "especialistas" que dan una opinión "fundada" de 15 segundos, etc.
.- Temor a gripes, enfermedades, mala alimentación, a consumir todo tipo de productos porque "hacen mal". Alguien se ha acordado ahora del virus H1N1?...o ya pasó de moda? Evidentemente, con todo la publicidad los Gobiernos fueron obligados a comprar millones de dolares en Tamiflú al único laboratorio posible, para ser entregados a la población que en masa se avalanzó sobre hospitales y clínicas al primer estornudo,aterrados de morir tosiendo solos en alguna calle. Que inteligentes, asi no se nota que la gente lo pagará igualemente de sus propios bolsillos, el gobierno de cada país se encargará mediante impuestos de esquilmarlos y cobrarse. Más gente muere en accidentes de tránsito, pero eso no lo dice nadie. El negocio ya está hecho. 48 horas se demoraron en instalar máquinas scanner especializadas en cada aeropuerto..."del mundo"....48 horas.....y hay gente que pasa semanas y muere, por falta de un insumo.
Para qué hablar de los meticulosos estudiosos de cuánto alimento consumen: que si tiene grasas saturadas, que si trae sucarosa, que si la vaca fue criada en un campo o se trata de engendros, etc, etc. Temor, tengan miedo! De todas formas tienen que comer para no morir...y les aseguro que comerán quien pague la mejor publicidad para sí , o...contra otros. No se acuerdan de las campañas de que el "huevo tiene mucho colesterol"?, pasa el tiempo y sale "huevo, el alimento perfecto", para que decir la publicidad hacia los "sanos pollos", o el "sucio cerdo"....cada cuál empujando mediante el terror a comprar lo suyo.
.- Temor a no cumplir los estereotipos de belleza. En Perú reclamaron a falabella y otra tienda que en sus publicidades colocaban chicas más del fenotipo de Dinamarca o algún país bajo europeo que de la propia realidad de ese país (aqui en Chile es lo mismo)...Lo que pudiese ser una inofensiva técnica de publicidad no es otra cosa que generar fuerte fustración en un sector clave en el consumo de cosméticos, gimnasios, liposucciones, y cientos de artificios para mejorar su cáscara en función de prototipos, que son plantados planificadamente en el inconsciente colectivo como los "ideales". Por eso los latinos a veces nos burlamos, o vemos raro, a esos gordos inmensos que se ven en el aeropuerto, gringos en general, cuando andan vestido de short y zapatillas, ambos vestidos iguales, feliz de la vida. A ellos no les llama la atención, aqui se burlan.
Luego nos preguntamos porque la depresión, las angustias, fustraciones, tienen a la gente sumergida en consulta de psiquiátras, orientadores, chamanes, y de lo que quieran.
Pierda el temor. La vida, en comparación a toda la naturaleza es pequeñísima en su extensión. Si vá a morir, muera haciendo lo que le gusta, con las personas que quiera, y en algunos casos, cuando quiera. Recuerde que un vegano puede morir de un porrazo en la cabeza tras pisar una cáscara de platano dejada en la calle, o un ecologista defensor de las ballenas puede morir cual Jonás dentro de una de ellas. A nadie le importa su esfuerzo vegano o ecologico y su pontificado al respecto, se vá a morir igual. Ni la ecología, ni nada, será prioridad para nadie mientras no sea un negocio. Acéptelo.
